¿En qué ando ahora?
Muy buenas a todos. En primer lugar me gustaría disculparme
por la inactividad, realmente pienso que sería muy interesante el poder
mantener una actividad constante en este blog, pero la realidad del día a día
lo hace bastante complicado. Hoy es uno de esos días en los que dispongo de
algo de tiempo para poder escribir, por lo que he decidido hacer un pequeño
resumen de lo que he estado haciendo en los últimos meses, en lo que
videojuegos se refiere. Vamos a ello.
Siendo totalmente sincero, siempre he tenido los videojuegos
como una vía de escape, un entretenimiento para mantener la mente despejada de
los problemas diarios. Últimamente es tan poco el tiempo que tengo para poder
sentarme tranquilamente a jugar, que siendo sinceros, he ido poco a poco
transformando mi afición a los videojuegos a una afición a Twitch, seguramente
todo el mundo que pueda llegar a leer estas líneas conozca la plataforma, no
necesita presentación, pero por hacer una presentación breve, digamos que es un
sitio web donde la gente que si tiene tiempo para poder jugar, hace directos de
sus game plays y consiguen seguidores, fama y dinero. Puede parecer baladí,
pero es uno de esos trabajos que hoy en día nadie da importancia, pero que cada
vez mueven más dinero, por ejemplo, algunos de los streamers de más éxito han
mudado su residencia a Andorra para poder disfrutar de una fiscalidad más
bondadosa para sus bolsillos.
Tal es lo que digo, que mientras que escribo estas líneas
suena de fondo uno de los casters más vehementes del panorama nacional, el gran
Ibai Llanos, capaz de narrar una partida de League of Legends como si de una
final de un mundial de fútbol se tratara.
Veo estos canales, lleno de chicos y chicas jóvenes capaces
de crear contenidos de la nada, y no puedo más que sentir envidia de ellos, no
de su fama, ni de su dinero, no se trata de eso, siento envidia ya que ellos han
nacido en un mundo en el cual para poder ganarse la vida solamente es necesario
un ordenador, cierta habilidad para jugar a un videojuego y, sobretodo, la
capacidad de entretener. Ellos ahora mismo no son conscientes, pero son los
pioneros de un futuro que entusiasma y asusta. Veamos algunas de las cifras que
mueven este negocio, tratando de buscar una base solida que respalde mis
afirmaciones:
- - Mientras escribo, 18.163 personas están viendo en directo el partido de G2 vs SK de la European League of Legends Championship Series.
- - Algunos de los streamers con mas seguidores generan ingresos mensuales por encima de los 400.000$ (yo también me quedé ojiplático).
- - Los ingresos por publicidad y patrocionio tampoco se quedan cortos (de media unos 3.000$ al mes para un streamer de éxito).
No puedo mas que asegurar que en estos tiempos en los que
vivimos, en este mundo de políticos podridos, de guerras y de miserias humanas,
internet se ha convertido en un trampolín lleno de esperanza para toda una generación
que por primera vez se divierte sin salir de casa, interactua sin tener
contacto físico y que ríe y siente con las alegrías, los éxitos y los fracasos
de otros a los que admiran, aman y por supuesto también odian (el hate existe
chavales).
Por eso pienso que si este blog algún día pudiera retomar
una actividad constante, tal vez no sería para hablar de mis miseras hazañas en
tal o cual game, sino que tal vez, podría llegar a convertirse en un foro
personal de opinión sobre estos chicos y chicas que son la punta de lanza de
toda una generación que convertirán internet en un lugar mejor. Mientras pienso
en ello, voy a subir algunos rangos a Hearthstone. Un besote gentuzilla.